Juego o Realidad

Mucha gente se preguntará que porqué la gente escribe.
Escriben para lamentarse en un pasado, olvidar en un presente y recordar en un futuro.

El tiempo nos aguarda y es hoy aquí donde yo lo transcribo.
Letras con un sentido conjunto se apilan sobre escritos ilegibles de caligrafia mediocre sobre la mesa de roble en donde siempre el sol se pone. Desde la cama donde seguramente estés tumbada, miras al frente sin decir nada, evocas recuerdos para luego pulirlos y finalmente escribirlos. Te redimes de tus penas y piensas que vuelas, vuelas en un mar de calma donde la tempestad en forma de mal karma fluye entre los visillos de la ventana que atrapa tu mirada.
Tu perlada esperanza echa las amarras y espera a ser detenida por la pluma sin tinta; viajas en el tiempo y la vida es distinta. Las palabras salen de tu boca como perdigón en busca de una posible paradoja, para basar en ella la vida de la cual tú te desprendes en medio del batallón. Como espartano que defiende su tierra, tu apilas cadáveres de hojas muertas y miras tus manos llenas de tinta negra, lágrimas de las letras que nunca podrán ser pronunciadas, historias que jamás serán contadas.

Te das cuenta de que el enemigo se acerca y el sol cada vez más se aleja. Sólo es uno, pero es suficiente para acabar con tus ganas de seguir pendiente;Cuelgas de una cuerda frágil que las parcas deleitan quitándole los hilos de la existencia, saben que sólo tienes pluma y tintero y que con ello apenas logras percibir el infierno.
Un mar de sílabas golpeando las puertas del saber para arrasarlo y con ello detenerte, pero tu te mantienes al frente, liderando ese sinvivir de monosílabos con placer. Disfrutas con el hacer del juego haciendo mates en pleno tablero, moviendo negras y avanzas en blancas, juegas con ventajas inesperadas, rimando pares con semejantes, sinónimos los añadimos al encaje y obtienes un filtro de verdades modificadas, como química enfrascada en un bote lleno de maraña.
Finjes haber acabado y cada mañana te preguntas si el futuro está predestinado.Escribes pensando que no hay nada más que las vivencias del pasado, que lo que está por llegar es solo un fluir de sugerentes mentiras que cobran vida en tu mano.

Frases acumuladas en un rincón del escrito, una esquina doblada puede ser el escape por el resquicio. Ves escaparse las betas del papel y tu cordura con él. Empiezas a imaginarte lejanos valles con cercanos fuertes, donde seguramente el príncipe busca a su princesa perdida, a su última idea que se perdió por la desconcentración, por la ira.

Las musas empiezan a esclarecer que no es talento sino un don. Quien sea portador del mismo, está claro que no caerá al abismo de la mente en blanco; Queda claro que quien lo tenga no escribirá palabras en vano, ni rimará con esfuerzo forzado. Será un maestro de la palabrería y combinará las palabras más exóticas para hacerte ver que no eres hijo predilecto de las diosas; Que tu afán por enmarcar adjetivos, se debe al escabuyirte del estribo y evitar así la perdición en el destino.

Mate que acaba moviendo palabras sobre el tablero,

Refleja los temores de la esclava de la pluma y del tintero;
No coloca peón negro en el último movimiento certero,
porque tiene miedo de acabar lo que muchos no pudieron.

By: Naizy